como hacer un smoothie de frutas

5 trucos para hacer un buen smoothie

De un tiempo a esta parte las cafeterías de todas nuestras ciudades se han llenado de una bebida que se ha hecho un hueco en nuestras meriendas. Estamos hablando del “smoothie”, el batido congelado elaborado a base de frutas. Ese concepto de congelación hace que el açaí, comercializado habitualmente helado, sea el elemento perfecto para elaborar este tipo de batidos.

Hacer un smoothie de frutas es más fácil de lo que puede parecer. Para que consigáis hacerlo de una manera óptima vamos a daros una serie de trucos para crear el perfecto batido helado que saciará nuestra sed en las calurosas tardes de verano.

1. La fruta siempre congelada

Da igual el tipo de fruta que sea, açai, pitaya, plátano, kiwi… Lo básico y fundamental es que esté congelada. Eso sí, usa el mismo tipo de producto que tomarías de forma natural. Existe el hábito de congelar fruta pasada de fecha dándole una “segunda oportunidad”. Del tiempo o congelada, la fruta debe mantenerse en un estado óptimo. De otra manera, lo acabarás notando en el sabor de tu batido de frutas.

2. Mezclar con sentido

Se debe tener cierto orden a la hora de combinar los diferentes tipos frutas. Hacerlo “sin cabeza”, haciendo un rebumbio de todo lo que tienes en la nevera puede convertir tu smoothie en una auténtica pesadilla. Lo mejor: pocos productos pero bien seleccionados.

3. Se atrevido

Lo cortés no quita lo valiente. No por combinar con cuidado nuestras diferentes piezas de fruta vamos a dejar de buscar nuevos sabores en nuestros batidos. A veces un toque de verdura puede potenciar de manera increíble el sabor de nuestra creación.

4. Leche de almendras

Un básico para triunfar en las meriendas. Una vez pruebas un batido con este tipo de leche, difícilmente podrás desprenderte de ella a la hora de hacer nuevas combinaciones.

5. Punto líquido

Y sin duda el más importante: el punto del smoothie. No buscamos una papilla. Buscamos un batido helado, muy frío, pero que siga siendo bebible en todo momento. De igual manera tampoco queremos un zumo extremadamente líquido. Juega con la leche hasta encontrar el punto perfecto para tu batido.

¿Preparado para hacer un smoothie perfecto?

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